miércoles, 7 de noviembre de 2012

El fantasma del mono endemoniado. Fernando Gascón


En la ciudad de Moscú un hombre de negocios tenía como acompañante un mono. El mono era para él como un familiar, le contaba su vida, le decía planes para el futuro en el trabajo y le daba comida rápida del BK.
Un día el hombre, llamado Fleming, se encontraba en un viaje de trabajo en Barcelona y dejo al cuidado del mono a una vecina. En una ocasión a la vecina se le olvidó cerrar la puerta del apartamento de Fleming y por la noche entraron unos demonios que se apoderaron del mono.
Al día siguiente cuando la vecina entró en el apartamento se encontró al mono con la cara ensangrentada y la cabeza dándole vueltas, se asustó tanto que volvió a su casa, sacó su escopeta y voló al mono en pedazos. Cuando volvió Fleming del viaje y vio restos diminutos de mono por todo su apartamento fue y le pregunto a su vecina, pero antes de llegar a la puerta de su casa se escuchó el sonido del mono, se giró y no encontró nada.
Cuando habló con su vecina ella le explicó lo que ocurrió, él se asustó tanto que preparó las maletas para irse al día siguiente. Esa misma noche, cuando Fleming se marchó a la cama, el espíritu del mono apareció en su jaula. Cuando Fleming lo vio gritó pero nadie le escuchaba, entonces el espíritu del mono comenzó a acercarse a su cama mientras gritaba en un idioma extraño y los ojos se le pusieron en color rojizo, en ese momento se arrojó sobre su amo y comenzó a atacarle.
Al amanecer, cuando la vecina salió a ver si Fleming se había marchado, entró en su apartamento y lo encontró muerto y mutilado. Al ver la situación salió corriendo a llamar a la policía pero apareció el fantasma del mono y le atacó también a ella.
Pasados unos días Fleming tenía una reunión a la que no pudo acudir por los acontecimientos ocurridos, desde su empresa llamaron a la policía.
Al llegar la policía a la casa encontraron a la vecina y a Fleming muertos y mutilados, así como restos del mono esparcidos por toda la vivienda. Unos días después, el oficial de policía encargado del caso recibió la visita del mono endemoniado.
En el momento en que el mono atacaba al policía, la esposa entró y pudo ver al fantasma, de forma instantánea salió corriendo y el espíritu detrás de ella. Cuando el mono alcanzó a la mujer, le atacó y la mujer falleció en plena calle. Hubo muchos testigos que afirmaron haber visto el espíritu de un mono endemoniado atacando a una mujer.
 A los pocos días la policía decretó que el culpable de las muertes había sido un enfermo mental que escapó de un centro hospitalario cercano a la zona y que había trabajado muchos años en un zoológico.