En la ciudad de Moscú un hombre de negocios tenía
como acompañante un mono. El mono era para él como un familiar, le contaba su
vida, le decía planes para el futuro en el trabajo y le daba comida rápida del
BK.
Un día el hombre, llamado Fleming, se encontraba en
un viaje de trabajo en Barcelona y dejo al cuidado del mono a una vecina. En
una ocasión a la vecina se le olvidó cerrar la puerta del apartamento de
Fleming y por la noche entraron unos demonios que se apoderaron del mono.
Al día siguiente cuando la vecina entró en el
apartamento se encontró al mono con la cara ensangrentada y la cabeza dándole
vueltas, se asustó tanto que volvió a su casa, sacó su escopeta y voló al mono
en pedazos. Cuando volvió Fleming del viaje y vio restos diminutos de mono por
todo su apartamento fue y le pregunto a su vecina, pero antes de llegar a la
puerta de su casa se escuchó el sonido del mono, se giró y no encontró nada.
Cuando habló con su vecina ella le explicó lo que
ocurrió, él se asustó tanto que preparó las maletas para irse al día siguiente.
Esa misma noche, cuando Fleming se marchó a la cama, el espíritu del mono
apareció en su jaula. Cuando Fleming lo vio gritó pero nadie le escuchaba,
entonces el espíritu del mono comenzó a acercarse a su cama mientras gritaba en
un idioma extraño y los ojos se le pusieron en color rojizo, en ese momento se
arrojó sobre su amo y comenzó a atacarle.
Al amanecer, cuando la vecina salió a ver si Fleming
se había marchado, entró en su apartamento y lo encontró muerto y mutilado. Al
ver la situación salió corriendo a llamar a la policía pero apareció el
fantasma del mono y le atacó también a ella.
Pasados unos días Fleming tenía una reunión a la que
no pudo acudir por los acontecimientos ocurridos, desde su empresa llamaron a
la policía.
Al llegar la policía a la casa encontraron a la
vecina y a Fleming muertos y mutilados, así como restos del mono esparcidos por
toda la vivienda. Unos días después, el oficial de policía encargado del caso
recibió la visita del mono endemoniado.
En el momento en que el mono atacaba al policía, la
esposa entró y pudo ver al fantasma, de forma instantánea salió corriendo y el
espíritu detrás de ella. Cuando el mono alcanzó a la mujer, le atacó y la mujer
falleció en plena calle. Hubo muchos testigos que afirmaron haber visto el
espíritu de un mono endemoniado atacando a una mujer.
A los pocos
días la policía decretó que el culpable de las muertes había sido un enfermo
mental que escapó de un centro hospitalario cercano a la zona y que había
trabajado muchos años en un zoológico.